EJERCICIO LEGAL DE LA BAJEZA Y EL EGOISMO
El año pasado, y criticando el envío de compatriotas uruguayos carenciados a Cuba para ser operados de cataratas, un oftalmólogo dijo públicamente que “nada es gratis”. Por supuesto que subliminalmente quería pasar el mensaje rastrero de que habría algún pago oculto pactado con el gobierno cubano, o cosas por el estilo, pero en el fondo, estaba expresando algo que piensan una buena parte de ciertos profesionales universitarios, para los que efectivamente “nada es gratis”, y se olvidan que su educación si fue gratuita, o mejor dicho que fue pagada por la sociedad en su conjunto, y que si supieran de la existencia de la palabra solidaridad deberían al menos pensar en devolverle a esa sociedad algo de lo que obtuvieron.
Ahora, las sociedades anestésico quirúrgicas atacan nuevamente, e inician un juicio por ejercicio ilegal de la medicina contra tres médicos cubanos que inspeccionaron a los candidatos a viajar a Cuba para someterse a las operaciones que ese país y sus médicos si les brindarían, en forma gratuita y solidaria, a nuestros compatriotas.
Las brigadas médicas cubanas han desarrollado tareas solidarias en innumerables lugares del mundo, y lo hacen actualmente. Se los puede ver en Haití, en Guatemala, en Mali, en Namibia, en Burkina Faso, Bostwana, Honduras, etc., y sin contar la atención solidaria en su propio país, como la que llevan a cabo con nuestros compatriotas.
Por cierto que el trabajo de los médicos cubanos ha sido reconocido a nivel internacional por representantes de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud. Actualmente trabajan en el programa Barrio Adentro, en Venezuela, en donde han realizado más de 15 millones de consultas.
Hace pocos días, la brigada médica cubana en Paquistán cerró su labor asistencial en ese país centroasiático -el que fuera afectado por un terrible huracán-, con más de un millón 700 mil pacientes atendidos, de los cuales el 49,1 por ciento son mujeres. La Ministra de Bienestar Social y Educación Especial expresó su agradecimiento al personal cubano, el cual enfrentó condiciones muy difíciles en las zonas afectadas, donde convivió con la población y venció las barreras del idioma y del clima.
Cuando el huracán Katrina, Cuba ofreció enviar a Nueva Orleáns 1.100 médicos, operación que se realizaría sin condiciones y que seria totalmente financiada por Cuba. Se trataba mayoritariamente de médicos con antecedentes de trabajo en zonas difíciles de América Latina y África, que tenían como promedio 32 años, 10 años de experiencia profesional y hablaban inglés. Cada médico portaba dos mochilas con 24 kilogramos de medicinas e instrumental y estaban dispuestos a trabajar en grupos de dos en las zonas aisladas por las aguas, donde aún quedaban damnificados.
Estos ejemplos de generosidad y solidaridad con el prójimo, no importa en que lugar de la tierra se encuentre, no se aprende en los libros de medicina.
Por cierto, la actitud de las sociedades anestésico quirúrgicas uruguayas no es pionera. También en Honduras, un pequeño grupo abogaba porque los médicos cubanos abandonaran el país, anteponiendo el lucro personal a la solidaridad por la vida. Pero también hay que decir que la gran mayoría de la población hondureña es agradecida y respaldó con documentos, protestas y marchas la presencia de estos médicos que tanto necesitaban y se impuso la voluntad popular. También en Venezuela, sucedió lo mismo, y un tribunal venezolano atendió un amparo interpuesto por la Federación Médica de ese país (FMV), contrarios a la asistencia cubana en el plan "barrio adentro", uno de los proyectos sociales que impulsa el presidente Hugo Chávez con ayuda de profesionales de Cuba. En ese caso, la ministra de Salud, María Lourdes Urbaneja, comentó: "Lo menos que podemos es lamentar que se hayan interpuesto intereses que no son los dirigidos a garantizar que la gente viva mejor". Por estos lares también, parece ser que don dinero sigue siendo para algunos su guía espiritual, pero la sociedad los está mirando y tomando nota, mientras hace arcadas.
Ahora, las sociedades anestésico quirúrgicas atacan nuevamente, e inician un juicio por ejercicio ilegal de la medicina contra tres médicos cubanos que inspeccionaron a los candidatos a viajar a Cuba para someterse a las operaciones que ese país y sus médicos si les brindarían, en forma gratuita y solidaria, a nuestros compatriotas.
Las brigadas médicas cubanas han desarrollado tareas solidarias en innumerables lugares del mundo, y lo hacen actualmente. Se los puede ver en Haití, en Guatemala, en Mali, en Namibia, en Burkina Faso, Bostwana, Honduras, etc., y sin contar la atención solidaria en su propio país, como la que llevan a cabo con nuestros compatriotas.
Por cierto que el trabajo de los médicos cubanos ha sido reconocido a nivel internacional por representantes de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud. Actualmente trabajan en el programa Barrio Adentro, en Venezuela, en donde han realizado más de 15 millones de consultas.
Hace pocos días, la brigada médica cubana en Paquistán cerró su labor asistencial en ese país centroasiático -el que fuera afectado por un terrible huracán-, con más de un millón 700 mil pacientes atendidos, de los cuales el 49,1 por ciento son mujeres. La Ministra de Bienestar Social y Educación Especial expresó su agradecimiento al personal cubano, el cual enfrentó condiciones muy difíciles en las zonas afectadas, donde convivió con la población y venció las barreras del idioma y del clima.
Cuando el huracán Katrina, Cuba ofreció enviar a Nueva Orleáns 1.100 médicos, operación que se realizaría sin condiciones y que seria totalmente financiada por Cuba. Se trataba mayoritariamente de médicos con antecedentes de trabajo en zonas difíciles de América Latina y África, que tenían como promedio 32 años, 10 años de experiencia profesional y hablaban inglés. Cada médico portaba dos mochilas con 24 kilogramos de medicinas e instrumental y estaban dispuestos a trabajar en grupos de dos en las zonas aisladas por las aguas, donde aún quedaban damnificados.
Estos ejemplos de generosidad y solidaridad con el prójimo, no importa en que lugar de la tierra se encuentre, no se aprende en los libros de medicina.
Por cierto, la actitud de las sociedades anestésico quirúrgicas uruguayas no es pionera. También en Honduras, un pequeño grupo abogaba porque los médicos cubanos abandonaran el país, anteponiendo el lucro personal a la solidaridad por la vida. Pero también hay que decir que la gran mayoría de la población hondureña es agradecida y respaldó con documentos, protestas y marchas la presencia de estos médicos que tanto necesitaban y se impuso la voluntad popular. También en Venezuela, sucedió lo mismo, y un tribunal venezolano atendió un amparo interpuesto por la Federación Médica de ese país (FMV), contrarios a la asistencia cubana en el plan "barrio adentro", uno de los proyectos sociales que impulsa el presidente Hugo Chávez con ayuda de profesionales de Cuba. En ese caso, la ministra de Salud, María Lourdes Urbaneja, comentó: "Lo menos que podemos es lamentar que se hayan interpuesto intereses que no son los dirigidos a garantizar que la gente viva mejor". Por estos lares también, parece ser que don dinero sigue siendo para algunos su guía espiritual, pero la sociedad los está mirando y tomando nota, mientras hace arcadas.
Jueves, 25 de Mayo de 2006
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